CAPÍTULO 5(e)
El Lenguaje De Los Isótopos-2
(Continuación de:
http://000-arquimedes.blogspot.com.ar/2016/08/que-pasara-con-el-clima-12.html)
http://000-arquimedes.blogspot.com.ar/2016/08/que-pasara-con-el-clima-12.html)
Las partículas más pequeñas en las que puede dividirse un
elemento químico sin que pierda sus propiedades características, son los
llamados átomos. Un átomo de
cualquier elemento químico está formado por un cuerpo central pequeñísimo,
llamado núcleo, alrededor del cual se mueven partículas aún más pequeñas
llamadas electrones. Si por ejemplo tomásemos un anillo de Oro puro (ya vimos
que el Oro era un elemento químico) y
dispusiésemos de los medios técnicos como para dividirlo en fracciones
sucesivamente más pequeñas, llegaría un momento en el cual fraccionaríamos los
restos del anillo en unos pocos átomos.
Si por ejemplo, cada una de esas partes llegase a tener sólo cuatro átomos, éstos seguirían manteniendo las características distintivas del Oro. Lo mismo pasaría con los dos fragmentos de dos átomos cada una en el caso de una división posterior. Inclusive si en una división ulterior pudiésemos separar esos dos átomos entre sí, cada uno de ellos por separado conservaría las características distintivas del Oro inicial. Pero con una posterior división de uno de esos átomos en sus partes integrantes, o “partículas sub-atómicas” ( o menores que un átomo) obtendríamos un núcleo por un lado y electrones por otro lado. Y ambos por separado ya no tendrían ninguno de aquéllos caracteres que distinguían al Oro inicial de los demás elementos químicos.
Vemos entonces que los átomos están compuestos por un núcleo y electrones. El núcleo está formado por protones que tienen carga eléctrica positiva. Por su parte los electrones tienen carga eléctrica negativa y (salvo casos especiales que ya veremos pues son los de interés en este punto), equilibran las cargas eléctricas positivas del núcleo. Lo que equivale a decir que en un átomo común, hay igual cantidad de cargas eléctricas positivas (protones) y cargas eléctricas negativas (electrones.)
El átomo más simple es el átomo de Hidrógeno denominado Protio (enseguida veremos este tema en detalle.) Este átomo tiene un núcleo con un solo protón ( = una sola carga eléctrica positiva) y cuenta con un solo electrón ( = una sola carga eléctrica negativa) equilibrando esa única carga eléctrica.
Los átomos más complejos van teniendo más protones en su núcleo, con lo que incrementan su cantidad de cargas eléctricas positivas. Por tal razón tienen a su vez más electrones (cargas eléctrica negativas) equilibrando esas cargas positivas.
Desde el punto de vista del peso ( = peso atómico), un protón tiene peso atómico unitario. Así podemos apreciar que entre otras características, cada elemento químico se distingue de los demás por el peso de su núcleo, al cual se lo llama peso atómico, posible de ser medido por técnicas físicas especiales.
Para su mejor estudio, los distintos elementos químicos existentes en la naturaleza han sido ordenados tomando precisamente como referencia el peso atómico de sus respectivos núcleos. Desde el Hidrógeno (Protio) con peso atómico uno, en adelante. Esto se lo debemos al genial Dmitri Mendeleyv. (Continúa en: http://000-arquimedes.blogspot.com.ar/2016/08/que-pasara-con-el-clima-14.html)
Si por ejemplo, cada una de esas partes llegase a tener sólo cuatro átomos, éstos seguirían manteniendo las características distintivas del Oro. Lo mismo pasaría con los dos fragmentos de dos átomos cada una en el caso de una división posterior. Inclusive si en una división ulterior pudiésemos separar esos dos átomos entre sí, cada uno de ellos por separado conservaría las características distintivas del Oro inicial. Pero con una posterior división de uno de esos átomos en sus partes integrantes, o “partículas sub-atómicas” ( o menores que un átomo) obtendríamos un núcleo por un lado y electrones por otro lado. Y ambos por separado ya no tendrían ninguno de aquéllos caracteres que distinguían al Oro inicial de los demás elementos químicos.
Vemos entonces que los átomos están compuestos por un núcleo y electrones. El núcleo está formado por protones que tienen carga eléctrica positiva. Por su parte los electrones tienen carga eléctrica negativa y (salvo casos especiales que ya veremos pues son los de interés en este punto), equilibran las cargas eléctricas positivas del núcleo. Lo que equivale a decir que en un átomo común, hay igual cantidad de cargas eléctricas positivas (protones) y cargas eléctricas negativas (electrones.)
El átomo más simple es el átomo de Hidrógeno denominado Protio (enseguida veremos este tema en detalle.) Este átomo tiene un núcleo con un solo protón ( = una sola carga eléctrica positiva) y cuenta con un solo electrón ( = una sola carga eléctrica negativa) equilibrando esa única carga eléctrica.
Los átomos más complejos van teniendo más protones en su núcleo, con lo que incrementan su cantidad de cargas eléctricas positivas. Por tal razón tienen a su vez más electrones (cargas eléctrica negativas) equilibrando esas cargas positivas.
Desde el punto de vista del peso ( = peso atómico), un protón tiene peso atómico unitario. Así podemos apreciar que entre otras características, cada elemento químico se distingue de los demás por el peso de su núcleo, al cual se lo llama peso atómico, posible de ser medido por técnicas físicas especiales.
Para su mejor estudio, los distintos elementos químicos existentes en la naturaleza han sido ordenados tomando precisamente como referencia el peso atómico de sus respectivos núcleos. Desde el Hidrógeno (Protio) con peso atómico uno, en adelante. Esto se lo debemos al genial Dmitri Mendeleyv. (Continúa en: http://000-arquimedes.blogspot.com.ar/2016/08/que-pasara-con-el-clima-14.html)